
Uno de cada cuatro bebés sufre de cólicos, y a pesar de ser una molestia pasajera, pueden afectar bastante al bienestar del bebé. Aunque su origen puede tener distintos motivos, se trata siempre de gases. La realización de un suave masaje en la tripita del bebé está recomendada por la Asociación de Pediatría Española para prevenir y mejorar las molestias del lactante.